sábado, 23 de febrero de 2013

Las Políticas


Hace unos días, el periodista Mario Wainfeld en su columna dominical del diario Página/12 hizo una interesante reflexión sobre la política, su contenido de construcción minuciosa y palaciega, buscando atar los piolines territoriales en procura de la confección de una vigorosa red de entramados políticos, a la que denominó política en “minúsculas”; y el trazado de las grandes líneas programáticas, la construcción de las decisiones estructurales, la atención y solución a importantes problemas colectivos como la política con “mayúsculas”.

De mayúsculas…

La semana que se va tuvo un comienzo marcado por un despliegue interesante de la política con mayúsculas. El anfitrión, Intendente él, recibió al visitante, que también es local pero que ha tenido en sus últimos años de política un desempeño flojo en la localidad, todo lo que le ha valido perder frente a Farizano en la carrera a Gobernador en 2011. La visita estuvo cargada de agenda, fuertemente política, donde recíprocamente se han facilitado escenarios donde mostrarse como hacedores del destino colectivo en las trincheras adversarias con un elevado nivel de respeto y cuidado institucional.

Como fuera reflejado en la columna “Las herramientas y la hegemonía”, cada espacio político, el Acuerdo y el MPN, tienen estructuras de construcción política dentro de las que se mueven con soltura, que constituyen organizaciones afines, familiares, que comparten, en mayor o menor medida, la cultura política de cada conducción, pero que sí lo hacen definidamente en el trazo grueso de la construcción de cada proyecto. Dentro de esa lógica, los dos gobernantes fueron anfitriones del otro, y ambos compusieron en conjunto dos escenarios más. En la mañana recorrieron las instalaciones de la Asociación Puentes de Luz donde vieron los avances de la obra y se sacaron fotos con los niñitos que asisten a ese centro de actividades para chicos con discapacidad. Luego se dirigieron a la Chacra 28 donde se terminaron las primeras siete viviendas de un total de veinte que había comprometido el Gobernador a los dirigentes de base del partido provincial que fueran ubicados en esa zona luego de la toma de tierras que efectuaran en terrenos de la Chacra 4 en el transcurso del año 2009. Para la primera hora de la tarde quedó el plato fuerte de la jornada y que sin dudas constituye un logro político de altísima relevancia para el Intendente local: la visita del Gobernador al Lote 27 y su recepción en él por parte del pleno de la Mesa Política que conduce dicho proyecto; y por último la visita a la reconstrucción del derruido ex Hotel Sol, un ambicioso proyecto del Intendente Fernández que cuenta con el fundamental aporte económico del Gobernador Sapag.

Ya fue dicho en este espacio de reflexión, Puentes de Luz es una asociación de aquellas que forman parte del escenario de despliegue hegemónico del MPN y tiene su mayor crecimiento asociado al vínculo privilegiado que, enhorabuena, lograron construir con la pasada administración municipal del MPN. En cambio, la Asociación Vecinos Sin Techo y el proyecto del Barrio Intercultural tienen un origen muy distinto, ya que emergen como construcciones sociales ante la ausencia de políticas públicas, enfrentando abiertamente al partido provincial. Es sabido que en el origen de ese proyecto intercultural estuvo el kirchnerismo pero también es claro que el comienzo de su materialización contó con el impulso de la extinta Intendenta Luz Sapag. Lo notable es que en todo este proceso, aún habiendo transcurrido cuatro años de gobiernos del MPN, el Gobernador haya pisado las tierras de este notable proyecto de la mano de otro gobierno kirchnerista. La asistencia, la potencia política que mostró, la relevancia de los actores participantes y los acuerdos alcanzados son sin dudas, uno de los pasos más interesantes dados en conjunto entre Provincia y Municipio por la construcción de políticas con mayúsculas en este tramo de ambos gobiernos. En este sentido, el gobierno local, que es quien ofrece el escenario, asocia a su proyecto político la capacidad de dichas acciones, ayudando al Gobierno provincial a retomar iniciativa en áreas y frente a actores que le han sido muy esquivos en la localidad cordillerana.

Viviendas, conexiones para servicios, obras de infraestructura, escuela. Una serie de proyectos, muchos millones y la concreción de demandas añeras se anotan ambos gobiernos en el haber de la política con mayúsculas, aquella que más gusta al ciudadano de a pie y más tributa de cara a las urnas, las inminentes y las lejanas.

… y de minúsculas…

La semana que se va tuvo un final marcado por un despliegue interesante de la política con minúsculas. El jueves pasado se retomó la primera sesión ordinaria del Concejo Deliberante donde se eligieron finalmente las autoridades del cuerpo. Lo cierto y como conclusión final es que el Acuerdo Político, en un resultado insólito que no debe recordar parangón en la historia, se ha quedado sin ocupar ninguna de las tres autoridades del Deliberante local. Entiende este escriba, que la cabal interpretación de la Constitución Provincial y el Reglamento interno del Concejo Deliberante, que son productos derivados de la Carta Magna nacional, inherentes a todo régimen presidencialista y que en suma son usos y costumbres de buena política, debiera haber llevado sin estridencias al cargo de Presidencia al edil Rodolfo Manson, tan sólo por el hecho de la disidencia respecto al Acuerdo Político en el gobierno que marcara oportunamente el Concejal Obeid hace ya casi un año.

El repaso de los votos obliga más que a análisis críticos a meras críticas, ya que el desempeño argumental de los ediles dejó mucho que desear, a diestra y siniestra. El resultado fue distinto a lo planteado en este blog en la columna “El discurso y sus implicancias”, pero el 6 a 4 resultante se explica en las ideas directrices de los votos que vertió el bloque del MPN en sesión.

El Concejal Saloniti comenzó su discurso indicando que iba a leerlo por contener ideas que no quería dejar en el tintero. Lo cierto es que el contenido puede ser un boomerang tanto como una catapulta. En verdad, el edil lo hizo pensando en que fuera una catapulta pero tiene más chances de lo otro. En síntesis, dijo que la decisión era producto de aquello que con mayor fervor le reclamaban los militantes en la seccional Lacar del partido, esto es votar a Obeid. Ensayó un ejercicio confuso sobre a quién beneficiaría tal decisión, lo que implica una clara torpeza. La política en minúsculas es notoriamente criticada a los ojos de la calle y no debiera ningún político enfatizar en los cálculos mezquinos que muchas veces motorizan sus decisiones. Ir y venir sobre la conveniencia o el perjuicio al gobierno en tal decisión le deja picando la utilización de ese recurso al ejecutivo, tanto como la mención de la intromisión de poderes de la semana pasada, jugó un mal trago al Intendente. Pero no fue este el pasaje más grave del discurso del edil emepenista. Al comenzar su alocución dijo que la decisión estaba más teñida por motivaciones partidarias que institucionales. Reitero que es lógico ese discurso de cara a la interna partidaria, pero el mismo debe quedar entre las paredes de la seccional. Lo políticamente correcto sería que el edil dijera eso entre partidarios y ensayara otra explicación en el recinto, a la vista de que tal incorrección no le permite cosechar nada de cara a la sociedad.

Las palabras del legislador por la UCR fueron quizás las más duras hacia el actual Presidente. Lo tildó de ausente y de incapaz hasta para conseguir una “abrochadora”, pero antes de emitir su voto con corrección política institucional indesmentible a favor de Manson, le recomendó irónicamente a este que le explique al Intendente la división de poderes “en el contexto de un asadito familiar”. Volviendo a las mayúsculas y minúsculas, es entendible que cualquier político se exprese en términos programáticos y conceptuales de cara al electorado y deje las minúsculas para las intrigas de palacio. Pero más comprensible sería si en el contexto de un debate en recinto los funcionarios profundizaran en todo cuanto puedan sobre los conceptos que explican las ideas que sostienen. Más allá de lo útil de la ironía, es inaceptable que el edil que debiera honrar la memoria de Alem no explique dónde residía el conflicto de poderes con el ejecutivo. La gravedad de tal sugerencia no puede diluirse en el capricho extinto de retórica barroca.

Sin duda, el desempeño más cuidado fue el del Concejal Bruno. Ya jugada la decisión por los votos previamente enunciados en el recinto, se refirió confusamente a la cuestión legal, cuidándose de esgrimir términos rigurosos hacia ninguno de los postulantes a presidir el cuerpo. Concluyó su breve alocución reafirmando el discurso de la necesidad de “independencia” que erróneamente deslizó el Intendente en la apertura de sesiones. En ese punto, fue sencillo para el concejal que ahorró en abundamientos y selló el definitivo 6 a 4.

Las alocuciones del oficialismo fueron francamente pobres. Pareciera como si en el fondo se esperanzaran con que el resultado sería positivo y se cuidaran entonces de embarrar el escenario retórico. Manson no defendió con fiereza su posibilidad, Otharan buscó más dejar abierta una posibilidad propia futura haciendo hincapié en el hecho de que tanto ella como Ambrogi podrían también aspirar a la Presidencia. El discurso de la Concejal de UNE fue, no obstante, el más encendido y el que más hizo pagar la decisión a su adversarios. A su vez, aportó, aunque confusamente, una mirada sobre el rol de los medios de comunicación a los que asignó partes de la responsabilidad por la instalación de alternativas factibles. Este punto merece el apartado final.

… se componen los discursos.

Como dijera en la columna precedente, San Martín no cuenta con grandes oradores ni desde lo conceptual ni desde su elocuencia. Pero los discursos no son sólo una construcción retórica. Comprobado está que los más eficaces de todos no son precisamente los que se enuncian con claridad y certeza conceptual sino aquellos que usufructúan, imprecisos, los lugares comunes que mayormente atormentan a las atribuladas clases medias, ávidas consumidoras de discursos mediáticos. En ese carril, no es de extrañar que cosechen el beneplácito de las plateas, tanto radiales como escritas, aquellos formatos simples, ruidosos y vulgares que trillan mejor los discursos lineales que gustan de asignar relaciones causales de fácil consumo.

En esta semana, la mayoría de las editoriales radiales y escritas, en los diversos medios locales, asumieron como verdad indiscutida el hecho de que la decisión adversa al ejecutivo era producto de lo mal que había sido recibido el discurso con pedido incluido del Intendente. La concejal Ambrogi ligó este desempeño casi unánime a veladas intenciones de las distintas usinas locales. Este escriba entiende oportuno fijar su mirada en las prácticas de la profesión pero discrepa en el fondo. No son (en todos los casos) intereses políticos o económicos los que direccionan interpretaciones mediáticas, más bien es una relación de pereza intelectual y de baja capacitación por parte de aquellos que desempeñan la actividad. La venta sistemática de enunciados efectistas en los medios genera una pereza tal que lleva a sus redactores a asumir razonamientos simples y desestimar entramados más complejos. Entiende esta columna que nunca una decisión de trascendencia institucional tal puede desencadenarse por meras cuestiones de estilo. Del mismo modo, se entiende que por más generoso, educado y simpático que sea un gobernante, y más allá de que muchos sean los chocolates que obsequie día a día a sus adversarios no podrá por ello hacerles votar lo que los intereses u objetivos de los otros consideren inaceptable. Suponer tal cosa es no entender la política ni en minúsculas ni en mayúsculas pero si tributar a lecturas simples y aceptables.

Esto, que es una falencia generalizada, y desplazó cualquier crisis de verosimilitud entre las distintas notas hechas sobre el tema, pone en evidencia, además, una profunda falencia del actual gobierno. No hubo interlocutor alguno de parte del ejecutivo (ni aún de los concejales del Acuerdo Político) que saliera en el transcurso de la semana a poner en conflicto esa hegemonía discursiva. La batalla que ya parecía decidida no tuvo quien estuviera dispuesto a hacerle vender cara la derrota.

Así las cosas

La semana se va como una más. El ejecutivo podrá decir que ganó en las mayúsculas y perdió en las minúsculas. Que trae al gobernador para darle respuestas a la propia construcción en una muestra de buen desempeño en escenarios viscosos. Sin dudas tiene cierta razón. Y aunque sólo pareciera servir de consuelo interno, el posicionamiento explícito de la oposición dejando sin responsabilidad institucional al Acuerdo Político, generando un hecho poco frecuente y sin demasiados beneficios extra que no sean el golpe coyuntural, puede significar un triunfo a largo plazo, clarificar del vamos la interna propia y señalar el rol opositor como un triunfo minúsculos de esos que suelen criticar aquellos discursos que esta semana le fueron esquivos al oficialismo.

Emilio R. 

lunes, 18 de febrero de 2013

El discurso y sus implicancias


Apertura legislativa: repasos, advertencias y pedidos; desafíos y riesgos. Una interpretación sobre las culturas políticas de los ediles opositores. Y una hipótesis sobre escenarios futuros.

El Intendente asistió el día viernes a la apertura del año legislativo de nuestra comunidad. El hecho, intrascendente cada vez que ha sucedido años anteriores con uno u otro intendente de partidos políticos diversos, en el escenario actual de representación política fragmentada y pluripartidaria, se convirtió en instancia propicia para trazar una serie de definiciones políticas en la voz de los distintos actores locales.
Repasos
El Intendente habló largo y tendido sobre la gestión, la cual es muy criticada por sus adversarios ya que le asignan pocos logros sustanciales y mediocre desempeño en las labores cotidianas. Lo cierto es que Fernández enumeró una serie de acciones de gobierno, hizo particular eje en tres áreas que parecieran contar con la atención destacada del ejecutivo actual, cuales son educación, vivienda y turismo, y reflexionó sobre la “responsabilidad” de ser gobierno, como una crítica velada a los sectores de oposición, tanto por definiciones pendientes en el Deliberante como por acciones del gobierno anterior al que Fernández le critica el manejo de los recursos humanos y financieros.
Detalló lo hecho en turismo, relacionando el desempeño más que positivo del sector durante esta temporada al buen trabajo de la Secretaría a cargo de Vellido y al mismo ENSATUR, en lo que significó la reedición del cruce de definiciones en cuanto al Ente, retomando la crítica sectorial a los ediles de los bloques opositores (a excepción de la concejal Mercedes Tulián del PVSS). Luego fue muy enfático en lo que considera una veta del enriquecimiento local en materia de diversificación productiva: sostiene Fernández que el antiguo y derruido Hotel Sol devendrá en un centro de estudios regional capaz de brindar capacitación universitaria a jóvenes de la localidad y las zonas aledañas. Finalmente se explayó sobre la problemática de vivienda y abundó en números sobre lo hecho y por hacer, atando el desempeño a la buena relación y al trabajo conjunto con la Provincia y la Nación, lo que es sí todo un dato de esta etapa y que el actual gobierno enuncia como capital que le pertenece a su cultura política, mal que pareciera pesarle a propios y extraños.
Si la enumeración de Fernández es correcta y hay una relación directa entre la valoración de lo hecho y los resultados que le asigna a dichas acciones, el desempeño de la actual gestión no ha sido malo, independientemente de la fertilidad que lo caracteriza para cobijar conflictos. Lo que sería más que notable y horadaría aún más sobre lo trillado es que el gobierno actual tiene una ausencia absoluta de política comunicacional. No es raro si pensamos que no abundan legos en la materia por estas cordilleras, pero tal no es excusa. Todo gobierno que aspire a conducir trazados culturales debe apuntar al largo plazo y, como lo ha demostrado el contexto nacional de los últimos años, a una baja incidencia en la penetración mediática dominante debe corresponderle una potente política comunicacional. Pero tal esta ausente. El dato paradigmático que lo ilustra fue la réplica exacta que dos medios digitales locales (http://www.lacardigital.com.ar/content/nuevo-centro-para-adultos-mayores-en-san-mart%C3%ADn-de-los-andes y http://www.patagonia-news.com.ar) hicieron de una gacetilla que asignaba la concreción del inaugurado Club de Día de PAMI-MSMA al Gobierno Provincial: no fue desmentido por la oficina de prensa municipal ni parece haber sido advertido de ello ningún funcionario local, lo que habla de una grave falencia en el área, lo que constituye una grave falencia política, ya que implica que el relato de lo propio llegó a los medios de parte de la oficina de prensa de los adversarios.
Advertencias
El Intendente dejó al pasar en distintos tramos del discurso dos o tres frases que llaman la atención porque dejan flotando insinuaciones interesantes, riesgosas. Fue enfático al decir que no tenía “consideración hacia sector alguno que pretenda negocios desmedidos a expensas de los recursos que son de todos”. Y concluyó con que iba a “denunciar públicamente estos hechos cuando correspondan”. No esta claro, pero deja entrever esta frase cierta relación con un runrún que circuló a raíz de la fracasada última sesión legislativa del año anterior (y que se mencionara al pasar en la columna “Al año” de este blog). En ella naufragaron una serie de ordenanzas que se venían trabajando y el murmullo adjudicó la actitud obstruccionista de la oposición a la negativa del gobierno a conceder un beneficio impositivo a la familia de la concejala del MPN Natalia Vita por más de un millón y medio de pesos. La cifra es escalofriante y tal le resta verosimilitud, pero además la negativa al tratamiento provino de todo el arco opositor lo que hablaría de una participación extendida en la cuestión si tal fuese cierto. Pero también mencionó extorsiones en relación a prometidos apoyos políticos a cambio de cargos públicos. Los sindicados en los pasillos del palacio cabildean ambivalentemente entre el ex Acuerdo Julio Obeid y el ex PJ Alberto Bruno. Datos, información dura, indicios claros, no hay. Los propaladores aprovechan lo fecundos que son los susodichos a la hora de cobijar intrigas que incluyan barro y acuerdos grises. El tiempo por venir esclarecerá en estos aspectos o no.
Lo cierto es que dejó tendido un manto de sospecha sobre el accionar del concejo, o al menos de algunos concejales no individualizados. Es sabido que esto, más que el pedido por el concejal Manson, preocupó en los distintos bloques, y sin duda se constituye en condimento de las decisiones de la semana entrante.
El pedido en cuestión
También aprovechó la ocasión para realizar un pedido al pleno del Concejo que no se había escuchado nunca en años y gestiones anteriores. Fernández fue claro, ubicó a Obeid lejos del Acuerdo Político. Lo hizo sin rispideces discursivas pero con claridad, pidió el acompañamiento racional y responsable a la voluntad del Ejecutivo sobre las opciones a la Presidencia del cuerpo. El edil Manson fue el elegido,  pero la explicitación sirvió para reivindicar en los discursos opositores la idea de la intromisión de poderes, algo que, mal que le pese, reconoció en su propio discurso el Intendente, lo que es sin duda una torpeza y lo obliga a discutir el nudo argumental de la oposición y no el propio.
De culturas y ocasiones
Sin duda los condimentos de esta semana alteran el curso de la que se inicia. Fernández tiró carne de diversas especies y enriqueció el menú, complicando la elección de los comensales. 
Los huesos que debe roer el Acuerdo en el Concejo son de distinta naturaleza, por ende los componen distintos ADN políticos con sus respectivas historias e idearios que representar, consolidar, revalidar. Para el político de raza esa sustancia constituye una tiranía de la que rara vez logra liberarse, a no ser por convicciones mas convenientes (como sostenía Marx, el liberal). Los nóveles en este arte de lo imposible no tributan a no ser en la vehemencia y el corto plazo, creen que todas las bolas son la ultima y primitivos ellos, apuestan color. El Concejo actual es movidito, invita a la creatividad lírica, pero carece de profundidad conceptual, no tiene buenos oradores ni tejedores de acuerdos preexistentes. En general parece signado por la cultura política posmoderna que habla de representaciones circunstanciales que tienden al cuentapropismo ideológico. Este signo puede ser un obstáculo estructural para este gobierno a no ser que las estructuras con historias reencarnen nuevamente en liderazgos locales o regionales que les den previsibilidad política de largo plazo y los torne en interlocutores institucionales.
Son tres
El gobierno tiene tres culturas muy distintas enfrente. Empecemos por la más antigua y hoy, más menuda. La UCR pasó de su origen popular a buscar refrenar la hemorragia cívica. Como la cultura política dominante, a izquierda y derecha, la hegemoniza el peronismo, el centenario partido de Alem conserva su krausismo originario y vocifera republicanismo ante el avance apocalíptico del populismo. Su referente local es un ciudadano prolijo, bien intencionado, cultor del lugar común y el "deber ser", lo que muy probablemente lo obligue a dejar de lado su amistad añosa con Obeid y levantar su silenciosa mano para ungir a Manson. 4 a 0.
El PVSS no tiene ideario ni bagaje conceptual en el que abrevar. Lo suyo es decir "lo que piensa el vecino de a pie". Pero a ese producto incipiente del marketing político le falta un candidato que de la talla. Por ende la demagogia comunicacional derrapa rápidamente en la incontinencia oposicionista con argumentos difíciles de sostener para una comunidad aun chica. Precoz mostró su juego. Sin duda el Intendente le dio una mano y un pie: dirá que como ya dijo, “se opone a la intervención del Ejecutivo" y votara por Obeid. 4 a 3 en principio, aunque hay que ver si esa torpeza no precipita el cisma de la edil Tulián, que por lo bajo deja filtrar su fantasía de erigirse en un unibloque con el mismo sesgo ideológico pero con mucho mas cuidado por las formas, entre ellas la tan mentada Republica, que indicaría votar por Manson. Si queda 5 a 2 hay ruido en puerta y otra jugosa columna.
Finalmente el MPN. Su cultura originaria es el peronismo pero su dilatada trayectoria en el poder lo ha transformado en un conservadurismo popular estratégicamente a derecha y tácticamente ambiguo. Su experiencia institucional y su seguridad futura de que volverá a ocupar el despacho de la Intendencia lo obligarían a mascar la bronca y votar por Manson; no pueden convalidar un antecedente que se les vuelva en contra, máxime sabiendo la notable pulsión emepenista por el desgarramiento interno que bien pudieran sufrir a futuro con un díscolo e insumiso Presidente internista. En el medio y todo para mañana, Fernández se paseara junto al Gobernador a diestra y siniestra, lo que implica una obligación política para el bloque local, que bien pudiera transitar en cuidado silencio y resignar una posibilidad de nutrir la propia interna.  Pero he aquí la raíz de la eventual discordia. El MPN se encamina este año a una interna feroz de la que el joven edil Saloniti puede emerger sin nada. Son muchos locales que se la tienen jurada: la seccional no es fácil, hay muchos heridos con renombre interno y el Gobernador, factotum él, en su afán rereeleccionista se cuida en estimular gimnasia territorial a cuanto delfín quiera salir de pesca por la zona, todo lo cual profundiza la grieta sobre la que zigzaguea el MPN local. Así las cosas, cree este escriba que la conveniencia táctica y estratégica llevara al MPN a votar en silencio el nombramiento de Manson, con quien pese a los cruces mediáticos, parecieran cultivar una respetuosa relación. 7 a 3.

Obeid, que merece una columna para sí mismo, respondería a su cuentapropismo si ganara con los votos del MPN, pero si el resultado es el aquí arriesgado, votará por Manson y será entonces 8 a 3.
El más allá
Fernández también tendrá internas pero su juego de largo plazo parece leer mejor la realidad que contiene al juego de todos. La lista única será la ficha de Cristina y de Sapag, cada uno disciplinara hacia adentro y en esa lógica, la elección de ser fiel reflejo del kirchnerismo y reproducir el esquema nacional de buen vinculo con el MPN lo beneficia en el territorio y dificulta aun mas el desempeño del MPN local, tanto como el de Obeid, lo que puede dejar el rol crudo de oposición en manos de los concejales Bruno y Obeid, lo que también potenciaría la representación del Acuerdo Político sobre la clase media que puede quedar vacante ante un repliegue critico del MPN. 
Cuando se abran las urnas de la próxima sesión  se develará si no era lirismo lo que se pretende como hipótesis. En tanto el desenlace del cónclave abrirá seguro la otra interna feroz de este año: el PJ en el gobierno desplazará a un Obeid confiado en el apoyo que pueda recibir tanto del MPN triunfante de su propia interna como de Bruno. Este último puede terminar siendo el gran ganador del año. Se verá.
Emilio R.


lunes, 11 de febrero de 2013

Política de la playa al palco y la plaza


Un balance sobre las actividades del aniversario. La fortaleza de los que gobiernan y el penar de los que esperan



Los festejos del 3 y 4 de febrero, vigilia y aniversario de nuestra ciudad dejaron muchas líneas sueltas que deben atarse a algunas impresiones.

San Martín de los Andes fue sede de un evento único en su historia, un megarecital con dos grupos de primer nivel y una serie de jóvenes locales haciendo las veces de grupo soporte de los principales. Presencias de renombre nacional como el Ministro Carlos Tomada, el Secretario de Cultura Jorge Coscia, la Abuela de la Plaza de Mayo Estela de Carlotto y la Senadora Nanci Parrilli, quien siempre se destaca por su visibilidad en el territorio. Logística, diseño y organización prolija y cuidada mostraron la simbiosis entre el gobierno local y la Presidencia de la Nación que a través de la Unidad Bicentenario (aquella que organizara los festejos del Bicentenario y todas las fiestas con que el kirchnerismo vincula a su gestión la simbología nacionalista de festejos patrios) trajo a la localidad el evento.

La imponencia y la convocatoria (estimada en veinte a veinticinco mil personas) obligaron la asistencia del Gobernador Sapag y su señora esposa más alguno de sus Ministros. Baile, fiesta, caras políticas, mucha gente y fuegos artificiales. Una noche perfecta para el kirchnerismo anfitrión que retomó para la localidad un camino que había dejado marcado quien fuera secretario de cultura durante la gestión de Jorge Carro, el Ingeniero Flavio Caldas, una fuerte presencia pública en las calles y plazas, aspecto distintivo de la gestión que hace a cualquier municipio turístico.

 La plaza y el palco

La noche del 3 fue pura cosecha del kirchnerismo. El Gobernador, que no lo es de casualidad, no iba a venir a la localidad de la que es oriundo y en la que perdió la última elección contra Farizano a aplaudir la capacidad del kirchnerismo para montar un escenario de visibilización con notorias presencias políticas. Le copo la plaza a Fernández, cruzó cuatro camionetas sobre sus baldosas y anunció casas y subsidios a los cuatro puntos cardinales. Así, se montó él sobre el armado local para presentarse como un Gobernador activo en la localidad que le fuera esquiva hace un año y medio atrás.

Está claro que Sapag ha decidido jugar más fuerte en el interior que le fuera chúcaro. Se lo ve en reiteradas ocasiones por la localidad, ocupando lugares en actos de otros, lo que habla de audacia, inteligencia y decisión. Debe recuperar el peso perdido y sabe que es la única carta de su partido para el 2015. No de casualidad en declaraciones a la prensa minutos antes de iniciarse el acto en la Plaza dijo que no descartaba una postulación testimonial a las senadurías de este año.

El MPN, reinante hace más de cincuenta años ininterrumpidos en la Provincia, no goza de buena salud. No es casual que no gobierne ninguna de las ciudades más importantes de la provincia (Neuquén, San Martín, Plottier, Cutral Co, Zapala, Centenario, Junín). También es notorio que la lógica regionalista que el partido provincial imprimió desde siempre a la cultura provincial, es el mismo obstáculo que tienen sus adversarios. Ningún gobierno opositor es representante de un partido nacional por sí mismo. Los hay localistas, escisiones territoriales de pretenciosos armados provinciales e híbridos multipartidarios como el Acuerdo Político.

Pero esa dificultad es también un potencial. Las declaraciones del máximo representante de UNE y concejal por Neuquén Mariano Mansilla acerca de la figura de Fernández como potencial candidato a Gobernador, no son un exabrupto en todo sentido. Hay en la frase intención de alagar al anfitrión de la fiesta, voluntad de reafirmar con fuerza la presencia de UNE en el armado del Acuerdo Político ante el quiebre interno con el surgimiento de la UP a nivel provincial y local y, aunque pudiera traerle dolores de cabeza a Fernández con la Senadora Parrilli, hay también una lectura correcta en cuanto a los escenarios político electorales. Como sostuviera en la columna “Las herramientas y la hegemonía”, el espectro se debe partir en dos conglomerados de centroizquierda a centroderecha y los representantes de las pequeñas quintas partidarias, si quisieran el poder, deberían confluir en armados similares al Acuerdo Político. Claro está que esto ya se intentó y fracasó rotundamente. Uno lo experimentó este mismo PJ local durante el gobierno de Carro, y el otro el mismo Mansilla junto a Farizano en Neuquén. Ambos armados terminaron en la rejilla con resultados electorales similares. No obstante, el dirigente provincial de UNE marcó el camino y sentenció la interna propia indicando de qué lado y por dónde se hace la construcción provincial de cara a 2015, y en eso no hay duda de que el mejor emergente y más sólido es el armado local del Acuerdo Político, toda vez que sobrevivió fortalecido a un año extremadamente complicado (ya se analizó en la columna “Al año”).

El palco, la calle y los heridos

Lo antedicho es introducción a lo observado en el palco y la calle. Sapag, que al igual que Cristina Fernández, no lo dice pero lo promueve, va por la re-reelección. Al igual que le había hecho en el último aniversario de Neuquén al Intendente Quiroga, el Gobernador le trajo a Fernández algunos micros con militantes de la agrupación del Diputado Domínguez denominada “Más Por Neuquén”. Coparon la bocacalle frente al palco y mantuvieron una más que civilizada disputa del espacio físico y simbólico con las agrupaciones afines al gobierno local.

La escenificación dejó varias cuestiones claras para las miradas externas, para las lecturas internas de cada estructura y algunos heridos visibles.

Sapag, que no lo necesita ni lo explicita a diferencia del Intendente Fernández, es el único e indiscutido dueño del MPN. Ya no le nacen ni se le plantan los Sobisch ni los Tobares por derecha e izquierda, él reina y gobierna, es el MPN. Pero toda su potencia provincial dejó en evidencia una enorme carencia territorial en su pago chico, que muestra su debilidad y la orfandad del titular del partido a nivel local, el concejal y ex Secretario de Gobierno de Luz Sapag Carlos Saloniti. El Gobernador debió traerse a San Martín varios colectivos de distintas ciudades de la provincia ante la carencia de movilización local que muestra el presidente del bloque legislativo local. Eso que es potencia y decisión en Sapag es, aún, debilidad local y déficit manifiesto para el concejal emepenista, que si bien intenta cumplir en todo lo posible con el jefe máximo del partido no logra concitar la benevolencia de éste, que llega hasta el destrato.

Carlos Saloniti se alojó en la cuarta fila del palco al lado de la concejal Vita y muy lejos del conjunto de funcionarios que trajo el Gobernador a mostrarse en el sur provincial. Jorge Sapag bajó a todos los funcionarios de segundo y tercer nivel oriundos de la región con el firme mandato de mostrarse en el territorio, ser la cara visible de la demostración de presencia que quiere el mandatario y dar la señal que no puede el partido a nivel local, un MPN unido que muestra presencia asociada a la gestión de Estado. El operativo había comenzado hace dos semanas atrás durante una breve visita del mandatario que convocó militantes de todas las corrientes internas a la seccional partidaria. El mensaje fue claro, unidad. Pero las heridas son profundas. Como dijera en la primer columna de este Blog, titulada “Al año”, el concejal Saloniti no deja de ser un extraño al que los locales le niegan patria, la que tampoco le reconocen los provinciales.

El joven concejal, que fue el gran herido de las jornadas, pareció desentonar con sus críticas al gobierno local a la luz de los gestos de Sapag hacia Fernández, aunque es claro que la estatura y poder del Gobernador le permitirían no abundar en gestualidades hacia ningún mandatario local. Lo cierto es que Saloniti no participó de las diversas actividades y reuniones que incluyeron la agenda gubernamental, que si fueron ampulosamente seguidas por los funcionarios locales que responderían a una eventual construcción futura ante las debilidades locales, llámense el segundo del IPVU Marcelo Sampablo, el responsable de recupero financiero del mismo Instituto Juan Martín Insúa o Jorge “Cuco” Cuevas, referente local del Ministerio de Desarrollo Social. Lo cierto es que todos ellos tienen la debilidad local de la escasa referencia o la demasiada edad y la poca ambición, como el caso de Cuevas.

En definitiva, Sapag es demasiado en San Martín y hasta en la Provincia y el límite excluyente de la Constitución es la máxima debilidad del jefe partidario que no tiene recambio y que además, de ser gran elector, no pareciera hacer correr con suerte al caballo ya cansado de un partido con demasiados flancos y poco territorio. Para los referentes locales es un desconcierto que no hace mas que reavivar la pulsión centrífuga de las internas, con un jefe local sin respaldo y plagado de sombras que, sin querer quizás, parecen alentadas por los mismos gestos del Gobernador que insiste en dejarlo fuera de su agenda y enrostrarle en boca de subalternos la incapacidad para la conducción del pago chico sapagista.

A Fernández le corre otra suerte, al menos por ahora. Mostró una esquina tupida de militantes, que a más de locales y muchos de ellos asociados a la gestión, mostraron la unidad del Acuerdo Político. Se vieron las banderas del PJ y sus escudos sociales y políticos como el Movimiento Evita y La Jauretche, pero también el UNE y el estreno de estandarte del floreciente SURCO, la escisión neokirchnerista de Libres del Sur. También se mostró con visible presencia la pata organizacional de este armado en la figura emblemática de la Asociación Vecinos Sin Techo, que coronó una cuidada muestra artística y un desfile de carrozas temáticas, con acuerdos junto al Ministro Tomada y una reunión con el mismísimo gobernador que incluyó anuncios, y donde dieron definitivamente vuelta la página de la etapa destituyente hacía la construcción política de la solución a las problemáticas sociales.

Así las cosas, se llega al fin de una semana donde el gobierno local pareciera querer sentar un punto de refundación de su gestión. Presencia orgánica del conjunto del Acuerdo Político, fortaleza territorial frente al Gobernador Sapag, acompañamiento del gobierno nacional, unos cuantos anuncios de gestión en la línea discursiva que trabaja Fernández y la constatación evidente de la debilidad interna de quien hoy es con seguridad su más inmediato adversario político, el MPN local.

. . .

En política, hay muchas cosas que duran una semana, y se volverán a ver las caras este viernes cuando el Concejo Deliberante defina la presidencia del cuerpo, cuestión insignificante para el conjunto de la ciudadanía pero de vital interés para saber cómo se perfila políticamente el año que comienza de cara a varias internas.


 Emilio R.

sábado, 2 de febrero de 2013

Política, sindicalismo, corrupción y saqueos (Parte 1)


Una marcha no atendida, sus advertencias. Saqueos y efecto “espejo”. El Intendente de Bariloche en el ojo de la tormenta, su prontuario y el de sus amigos.



El fin de año trajo desenlaces de convulsión a un año por demás convulsionado. La conmemoración del 19 y 20 de diciembre de 2001 tan sólo once años después congregó en diversos escenarios, cubriendo el conjunto del mapa nacional, a actores dispuestos a dejar huella y reivindicar discursos parciales a partir de la ruptura irreductible que aporta la miseria y su capacidad para interpelar al conjunto de la sociedad.

Las primeras advertencias sobrevinieron de la misma Plaza de Mayo al albergar una escuálida marcha de las centrales sindicales opositoras a la Casa Rosada de la que partieron discursos que a la luz de los días y sus sucesos debieron haber sido tomados por el Gobierno nacional a fin de prevenir el convulso fin de año que traslucían. Allí estaban todas las aguas y todos los aceites, el líder camionero de formidable capacidad de movilización Hugo Moyano; el millonario líder duhaldista de los hambrientos peones rurales Momo Venegas; la otrora cruzada antisindical Patricia Bullrich; el gastronómico elocuente Luis Barrionuevo; el estatal en desgracia y acelerado declive Pablo Micheli; el republicanísimo e institucionalista Ricardo Alfonsín; el combativo defensor de pequeños productores pero socio locuaz de la Sociedad Rural Eduardo Buzzi; los eternos oportunistas de Libres del Sur; los maoistas de la Revolución Permanente en la universidad; los duros de la Corriente poli-Clasista y Combativa; y la enfermera Trotskista Vilma Ripoll. Todos juntos le fueron a dar el pésame al Gobierno nacional y a contarle lo que no supo escuchar.

La Guerra Nuclear

En el contexto de la atribulada marcha tan mentada, el líder de la CTA opositora, Pablo Michelli, advirtió al gobierno nacional que de no escuchar y atender sus demandas sobrevendría una “Guerra Nuclear” sin cuartel que sembraría la Sierra de la Ventana de focos revolucionarios de asalariados, hastiados ellos (con razones más que atendibles) de cepo cambiario e impuesto a la cuarta categoría de ganancias (hoy reajustada en un 20%). En consonancia, 1200 kilómetros alejados del km 0 el sindicato ATE del EPEN radicalizó su enfrentamiento con el gobierno de Sapag y 400 kilómetros más aún internados en la cordillera, ATE Municipal hizo lo propio con el gobierno de Fernández. Los púgiles retadores salieron a matar en el primer round y los defensores, más viejos y más mentados, estiraron el combate hasta que el desgaste hizo entrar en escena al Secretario General de ATE provincial Carlos Quintriqueo, quien gestionó la campana, unas tarjetas unánimes pero sin derrota estruendosa y el compromiso de que no se hable de la toalla que blandió en cada acuerdo. Ambos conflictos se apresuraron a sabiendas de que lo que pagan en opinión pública no deben recuperarlo por caja (o urna) por lo cual dieron muestra de que retaran nuevamente al ganador por puntos, que no los mueve un proyecto político en el territorio que deban cuidar o conservar y que “la sangre derramada no será negociada”.

Saqueador sacado

La Guerra Nuclear, como nos enseño la historia, nunca muestra el choque de las superpotencias, por ende ambas mueves fichas lejos de sus áreas de influencia en los territorios marginales. Bariloche fue noticia de fin de año por encarnar de manera cruda una dinámica de extorsión política que si bien a veces explota como oposición a gobierno legitimados, muchas otras surge del seno de sus armados para condicionar decisiones propias o ajenas que repercuten en el territorio. El Intendente Omar Goye protagonizó un hecho desagradable y de ribetes de complejidad asombrosa. Partes de su armado encarnado en diversas cooperativas, estructuras sindicales y empresariales se vieron envueltas en los saqueos que conmocionaron este sur, motivaron la respuesta violenta y contundente del gobierno nacional junto a la ira presidencial que crucificó al Intendente chocolatero y promovió una rápida remoción de su cargo, recientemente ratificado por el Tribunal Superior de Justicia rionegrino. La pólvora derritió al chocolatero.

Brevemente. El Intendente quedó involucrado en el armado de los aprietes a Supermercados a través de cooperativas y sindicatos que trabajan con el zar del chocolate desde hace más de una década. Una serie de gestos políticos, declaraciones a la prensa y flujo de fondos públicos entre los actores en los días previos a los hechos sirven como hilos con los que se tejen las hipótesis que movieron a concejales de todos los bloques políticos (menos la UCR) a votar la suspensión del controvertido Intendente.

Omar Goye tiene experiencia en estas dinámicas. Su experiencia se sustenta en antecedentes, los que se construyen con vínculos, cuyas extremidades llegan a San Martín de los Andes y a la capital provincial.

La Causa como metodología y razón

En el año 1999 Omar Goye se desempeñaba como contador del Policlínico Arbos (Asociación Regional Bariloche de Obras Sociales). Apenas unos días antes del final del segundo mandato de Carlos Menem, la Superintendencia de Seguros de Salud a través de la APE (Administración de Programas Especiales) bajo los números de resolución 3267/99 y 1234/99, le entregó al Policlínico Arbos 1.705.000 y 185.000 pesos/dólares respectivamente. El primer depósito era para “fortalecimiento institucional” y la “ampliación e incorporación de equipamiento de alta complejidad” pese a que el Policlínico ya tenía convocatoria de acreedores abierta, no tenía empleados dependientes, estaba concesionado y no se efectuó ni ampliación ni incorporación de tecnología. El segundo subsidio tenía el objeto de afrontar los gastos administrativos del concurso preventivo, pese a que se había suspendido el pago de todas las deudas.

Lo sospechoso fue que el Policlínico estaba en concurso de acreedores cuando recibió el aporte del Ministerio de Salud, en 2001 fue declarado en quiebra y en el proceso pericial nunca encontraron los asientos contables del subsidio recibido. La estafa no fue sólo a los trabajadores que se atendían en el Policlínico sino también al Estado nacional. Por el faltante de más de 2 millones de pesos/dólares fueron procesados por “estafa agravada” en perjuicio de la administración pública el Intendente depuesto y entonces contador de Arbos Omar Goye, junto a la comisión directiva de la institución. Ovidio Zúñiga de la Unión de Trabajadores Hoteleros y Gastronómicos (UTHGRA) era su presidente, Walter Cortés de la Asociación Empleados de Comercio (AEC) el vice, Víctor Carcar delegado interventor de la Unión Obrera de la Construcción (UOCRA) el tesorero, y el abogado Gonzalo Madrazo su representante legal. Casi como un reflejo y en el ocaso mismo de la década del 90 una asociación entre un sector del empresariado, sindicalistas y la dirigencia justicialista de entonces se las ingeniaron para montar una estructura capaz de desviar los recursos públicos desfinanciando al Estado y a entidades sin fines de lucro.

A inicios de la investigación el Fiscal Federal de Comodoro Py (Buenos Aires) Miguel Angel Osorio determinó que los fondos se habían remitido a "sociedades fantasma" que habían sido creadas para la única finalidad de desviar los fondos mencionados ya que habían sido ingresados “contra la factura 001" de cada entidad. Surtsey SA y Fox Valley SA, las mencionadas “sociedades fantasmas”, fueron presididas por Walter Cortéz, Víctor Carcar, el abogado Gonzalo Madrazo y el contador Omar Goye. La plana mayor de Policlínico quebrado que no utilizó para los fines previstos el subsidio del Estado nacional, era también la dirigencia de las sociedades fantasmas que hicieron desaparecer mágicamente los 2 millones de pesos/dólares.

La trama de corrupción que amalgama vínculos de algunos sectores del sindicalismo,  dirigencia empresarial y política terminó complicando sobremanera la continuidad de Omar Goye al frente de la intendencia de Bariloche. El manejo poco claro de recursos públicos, el apriete como herramienta de crecimiento político de determinadas organizaciones, sean sindicales o cooperativas, hundieron al Intendente preso de la dinámica de la que era el engranaje fundamental. Pero lo grave es la impunidad con que cuentan esos armados ya que la causa con más de diez años de instrucción ha tenido un sinnúmero de obstáculos interpuestos por las defensas de los imputados y aún no ha sido elevada a juicio pudiendo correr el riesgo de sobreseimiento el año próximo.

Hay en estas mecánicas al desnudo cuestiones importantes a reflexionar, que suponemos y deseamos no logren permear en la dirigencia política de nuestro pueblo, aún pequeño, donde se conocen las historias de la mayoría de los actores. Pero no de todos y es por alguno de esos vasos poco conocidos por donde se filtran los vínculos con estas dinámicas de construcción política que puede terminar en el desencantamiento definitivo de la comunidad en sus referentes políticos.


La semana que viene la extensión de esa organización a Neuquén y San Martín de los Andes, los vínculos sindicales en ambas ciudades y el armado político del partido provincial, la voluntad de una ex Intendenta y algo sobre el escenario local de acá a diciembre…

 Emilio R.